Cort�zar y el comic

Primera Parte: Contra los vampiros multinacionales: Cort�zar baila con Fantomas

por Antonio Lobos

Corr�an los a�os setenta cuando apareci� Fantomas contra los vampiros multinacionales. Una utop�a realizable narrada por Julio Cort�zar, publicaci�n que la cr�tica cortaziana ha olvidado de tanto no mencionar. De vez en cuando aparece en las bibliograf�as del autor, es cierto, y hasta un peque�o comentario es posible encontrar en Internet, pero los estudios te�ricos brillan por su ausencia.

Es, por cierto, una obra menor, si es que decir eso significa algo y recordando que El Hombre es Un Hombre aun en sus m�nimos gestos.

El olvido de la cr�tica puede obedecer a que esta narraci�n presenta, al menos, dos �rdenes de dificultades. Primero, su marcada vocaci�n pol�tica, expresada de un modo todav�a m�s evidente que en el resto de la producci�n del autor argentino. Y la cr�tica le huye, en general, al compromiso pol�tico y a analizar obras en las cuales el tono, el tema, el trasfondo, sean pol�ticamente contingentes. Por supuesto que hay excepciones, sobre todo si las obras atacan a gobiernos, instituciones o personajes relevantes, considerados demasiado progresistas desde la conservadora mirada de los detentadores del poder. Segundo, el texto incorpora diversos registros, muchos de ellos iconogr�ficos, de muy diversa procedencia, como comics, infograf�as, collages, ilustraciones, etc., cosa que hace muy complejo el an�lisis de la obra como pr�ctica textual. Y la cr�tica literaria se solaza y vanagloria de ser eso: cr�tica "literaria".

Para comprender el origen de Fantomas contra... hay que recurrir a la memoria, ya que la ciencia hist�rica parece funcionar mejor, am�n de sus desaciertos y mentiras flagrantes, con la distancia de los siglos, y ya sabemos que 20 a�os no es nada. Pero, dicen, los pueblos sufren de mala memoria, as� que para entender los setentas hay que echar una mirada sobre la d�cada inmediatamente anterior.

Las consignas de mayo del '68, uno que otro triunfo de las fuerzas progresistas, las utop�as volvi�ndose realidad, los hippies, el LSD y otras yerbas, perd�n, otras hierbas por el estilo, hac�an vivir un tiempo de optimista primavera intelectual, donde hab�a que ser realistas y pedir lo imposible.

La d�cada que le sigui� trajo r�pidamente el invierno. Los golpes militares llenaron el mapa de Sudam�rica de zonas oscuras de gobiernos dictatoriales. El "patio trasero" de E.E.U.U. segu�a bajo control gracias a la intervenci�n de diversas Agencias de Inteligencia (?), pero con un alto costo en v�ctimas de violaciones a los derechos humanos, asesinatos pol�ticos, cr�ticas m�ltiples por la actividad delictual del pa�s del norte en la prensa de (casi) todo el mundo e investigaciones de su propio congreso y de otros organismos internacionales.

Uno de estos organismos fue el Tribunal Russell II, en el que particip� Cort�zar, junto a otras notables personalidades pol�ticas y culturales, como el poeta y abogado chileno Armando Uribe. El resultado de la investigaci�n del tribunal result� en una amplia condena a diversos gobiernos: Chile, Brasil, Uruguay, Bolivia, Paraguay, el del propio E.E.U.U. y varias de sus agencias de inteligencia, como la CIA y la DEA, y algunas empresas multinacionales, como la ITT, la Kennecot, la Anaconda, etc.

Los pueblos, adem�s de tener mala memoria, a veces no quieren saber ni lo que les pasa. Quiz�s por ello las resoluciones del Tribunal amenazaban con desaparecer en el tr�fago de noticias del espect�culo, la moda o la cr�nica roja.

Cort�zar era ya un escritor lo suficientemente reconocido como para tener la idea de que un libro suyo podr�a servir de veh�culo para la publicaci�n del Acta del Tribunal y para las propias ideas sobre las dictaduras.

Construye Fantomas contra..., entonces, con una misi�n de denuncia que se aclara desde las primeras p�ginas, gener�ndose un "divertimento" intenso, apasionado, profundo y complejo.

Claro, al genio del escritor no le bastaba con una nouvelle de pura denuncia. Como ya era parte de su estilo y de su est�tica, sacude nuestra visi�n de la realidad con una extra�a mezcla de realidad y fantas�a, de literatura y c�mic, de biograf�a e imaginaci�n.

Cort�zar, en su viaje de Bruselas a Par�s, lee un c�mic, ya de vuelta de la reuni�n del Tribunal Russell II. En esa historieta de Fantomas participan como personajes �l mismo y otros escritores famosos. La lectura es atractiva a pesar de lo ingenuo de la trama, pero todo se complica cuando los personajes de esa historia y los reales "del texto" se confunden. El propio Fantomas aparece en el departamento de Julio Cort�zar varias veces, dejando una constante estela de vidrios rotos a su paso.

Fantomas, personaje que era la delicia de la infancia de nuestros padres y abuelos, all� por los a�os '50 y '60, descubrir�, junto al autor, que su historieta es falsa, un simple distractor para sus verdaderos enemigos, diversas agencias de seguridad y otras tantas multinacionales. El h�roe arremeter� contra ellos en solitario, como un antiguo caballero art�rico (el texto mismo tiene un par de encabezados a la usanza de la novela caballeresca), pero en vano. Los enemigos son demasiado fuertes, demasiado numerosos y se regeneran con facilidad.

El mensaje final es de desconfianza respecto de estos h�roes de infancia: confiamos demasiado en ellos, les esperamos con demasiada paciencia, nos hemos dejado atropellar y matar esper�ndolos. Lo �nico que nos puede salvar es unirnos todos contra este nuevo y gangsteril enemigo.

La incorporaci�n de collages y otros elementos por el estilo, no es rara en la obra de Cort�zar. Baste recordar Rayuela, �ltimo Round, La vuelta al d�a en ochenta mundos o Libro de Manuel, pero esta primera aproximaci�n al c�mic no dar� frutos m�s propios hasta 1981, cuando en Venezuela, se publique "La Ra�z del Omb�", desconocid�simo comic donde el autor, junto al pintor Alberto Cedr�n, mostrar� un terrible "pedacito de la historia argentina". Pero esa es otra historia, o mejor, otra historieta.



Nota: puedes leer el comics de Cort�zar en:http://ar.geocities.com/veaylea2002/cortazar/f1.htmly en: http://www.geocities.com/SoHo/Cafe/9980/cortazar/fantomas/sc-fan17.htmtambi�n puedes bajarlo en formato pdf en: http://www.literatura.org/Cortazar/Fantomas/o http://sololiteratura.com/fantomas.pdf. Desgraciadamente, ninguna de las p�ginas anteriores viene con el ap�ndice del Acta del Tribunal Russell II. A fin de cuentas, eso era lo que quer�a Julio, que ley�semos el Acta... as� que traten de conseguir el texto impreso y refresquen la memoria hist�rica.
La p�gina http://sololiteratura.com/miscelanea.html trae informaci�n sobre Julio Cort�zar y muchos links a variados textos del y sobre el notable autor argentino.

Portada del c�mic original del cual Cort�zar ocupa im�genes para su libro.

Portada del libro de Julio Cort�zar.

Fantomas visto por Ren� Magritte.

Cort�zar como personaje del c�mic de Fantomas, reutilizado en su libro.

Collage del propio autor, incluido en el libro.