Alexis Figueroa y Lota 1960.

Alexis Figueroa es poeta, guionista y escritor. El pasado 13 de marzo lanzó en Plop Galería, la historieta “Lota, 1960, la marcha del carbón”(LOM), junto a los dibujantes Vicente Plaza y Claudio Romo. Agradezco la gentileza de Alexis al publicar este texto inédito en que reflexiona sobre esta nueva obra d enarrativa gráfica chilena, aquí en Ergocomics.

POR ALEXIS FIGUEROA

I. Concepción.
La gráfica social regional se ha caracterizado por tener históricamente dos sistemas de producción: el muralismo y grabado tradicional, que en su periodo del 50 al 70 - a través de artistas como Santos Chavez, Rafael Ampuero, Guayasamín –en calidad de visitante ilustre- Pedro Millar y Julio Escámez entre otros, sientan las bases de una tradición al respecto. En la actualidad, se presenta una revalorización de sus contenidos, especialmente en el sentido del patrimonio y la identidad regional, en obras vinculadas fuertemente a la narrativa grafica (Zobaco, Elisa Chavarria, el libro antolóogico Masa Sícotrónica, el trabajo de Ibi Díaz y Nicolás Castañeda, Carlos Vergara, etc.) que precisamente investigan presentan y exponen esta tradición, adecuada a los nuevos procedimientos de producción de obra. Podría decirse que del mismo modo como el muralismo – tomando las ideas y voluntades del antiguo procedimiento mural- deriva hacia el graffiti y el street art, el grabado tradicional se ha desplazado también encontrando una nueva fuente de procedimientos en la gráfica narrativa contemporánea, posibilitando nuevas prácticas creativas, que hoy día buscan constituirse como un referente en la actividad. Lota, 1960… se instala en esta intención.

Por un lado, proponemos el incremento contemporáneo de una práctica gráfica y por otro el rescate y memoria de un acontecimiento constitutivo de nuestra identidad regional. En términos de contenido, el tema elegido vincula Historia y Patrimonio Intangible, en la constitución de Memoria Social de nuestra comunidad.

 

Lota 1960 Autores

El guionista Alexis Figueroa y los dibujantes Claudio Romo y Vicente Plaza en el lanzamiento de LOTA, 1960, LA MARCHA DEL CARBÓN en plop Galería, en Saniago de Chile.

 

II
Este libro comenzó a idearse a finales del año 2012. En ese entonces, conversábamos respecto a las posibles ediciones futuras de Nébula. Nuestra editorial es pequeña, y acaso nuestro desafío sea hacer al menos un buen libro por año. Este es uno. Para lograrlo nos propusimos trabajar con un grupo de excelentes ilustradores, conocidos tanto a nivel nacional como internacional, en un sistema tal que permitiese a cada uno desarrollar su estilo en su respectiva historia, con guiones proporcionados por Alexis Figueroa. Agregamos a esto, una curatoría visual de Claudio Romo (que por supuesto, también fue ilustrador de una historia) y el diseño final de Hari Rodríguez, de Nébula. Se trata de nuestra primera incursión en la novela gráfica de tema histórico social. Se trata a la vez, del rescate de diversas y distintas miradas sobre un suceso de características épicas como lo fue la Huelga Larga del carbón de Lota, en el año 1960, en Chile, VIII región.

Lota 2

 

Hubo un tiempo en que nuestra región fue principalmente fabril y obrera, y los grandes complejos industriales alimentaban la vida en las ciudades. Lota, Tomé, Chiguayante, por nombrar los más cercanos, trabajaban incrustados en la economía regional. Pero después pararon. Hoy en día, quedan ruinas. En Lota, en Chiguayante, en Tomé. Son testimonios de las nuevas condiciones de la economía mundial? ¿Qué queda entonces? La memoria. Surgen nuevas formas, nuevos sujetos, nuevos personajes colectivos. Y es que hay una distancia temporal compleja, social, histórica entre los años del 60 y el presente post 2000. Acaso el transporte del pasado físicamente más feble, sea la memoria, pero a la vez es lo único que nos permite -aún más que identidad- la noción de ser algo más que nuestra propia percepción, aislada y sola, ajena al otro, y así, sin continuidad ni historia, colectiva o personal. Hemos elegido entonces este episodio, justamente, como un hito, una inscripción, una grafía. Un episodio que habla y narra una voluntad de lucha y esfuerzo colectivo, una historia entonces no solo de coraje, sino esencialmente de comunidad. La historia de Lota, no es una historia de “mineros”, es historia de hombres y mujeres, niños, niñas, muchos, muchas, todos. Buscamos brindar una perspectiva artística, que proyectada en su ficción entregue este momento: Lota, 1960: La Gran Marcha del Carbón.

 

Lota 3

 

III
La historia contada, tiene lugar en el pueblo minero de Lota, a orillas del mar Pacífico, justo en el centro del Chile continental, a 38 kilómetros de Concepción. No fue la primera Gran Huelga del pueblo minero, puesto que desde comienzos del siglo XX, se venía gestando la conciencia de clase y la lucha sindical. Pero sí fue la última. A medida que pasaban los años, los sistemas y condiciones de explotación del carbón se hicieron inviables y es así que en los años 70, se encara una modernización minera -incluida transferencia de tecnología y expertizaje (algunos mineros y dirigentes viajan a yacimientos polacos para adentrase en nuevos métodos de explotación) que no resuelve el problema. Principalmente, a causa de la interrupción de la democracia y la vida ciudadana por el golpe de estado del 11 de septiembre de 1973. En Lota, son fusilados sin juicio*, o con juicios falsos, en los primeros días, dirigentes sindicales de mineros y profesores. Les sigue el alcalde y una lista de “enemigos de la ciudadanía”. A partir de esta fecha, Lota sobrevive como puede. Hasta que en 1997, dictadura militar y nuevos gobiernos democráticos mediante, el mineral es cerrado definitivamente. Altos costos de producción, necesidad de mano de obra barata para el naciente imperio de las forestales, iniciativas de rescate y desarrollo mal hechos y peor implementados, dan fin al carbón. A partir de esos días Lota entra en un periodo violento, azaroso. Se suceden los planes de la autoridad. Una ciudad y su gente, deben hacer su camino, por primera vez en más de 150 años, sin la industria que les ha dado origen y vida. Se habla de crisis. Poco a poco el problema deja de figurar en los diarios. El gobierno y los ministerios, parecieran ocuparse poco del tema. Así, la historia final del volumen, esa titulada “Lota 2018, Una historia de Ciencia Ficción”, puede ser una extrapolación natural de la situación de Lota a la fecha, tal si nos hubiésemos quedado con la visión y proyección de esos años. Justamente, puede ser una historia escrita como un vaticinio, un poco pasado el 2000. Pudo haber sido una metáfora o una profecía. Y acaso fue solo una advertencia distópica. Porque han pasado los años. Y el futuro –ya ha llegado y golpea a las puertas de la ciudad – es otro. Es distinto. Es la Lota de hoy. Una ciudad que busca vivir el presente, enraizando el futuro con su extraordinario pasado. Una ciudad que despierta con toda la potencia de su gente, su patrimonio y cultura.

 

Romo Figueroa

Claudio Romo y Alexis Figueroa.

* 22 de octubre de 1973 se asesina en Lota, mediante fusilamiento, a Wladimir Araneda , profesor y Secretario Regional del P.C. del Carbón; Isidoro Carrillo Tornería, ex gerente de ENACAR, Danilo González Mardones, ex Alcalde de Lota, y a Bernabé Cabrera Neira dirigente del Magisterio.
IV. Ficha técnica:
Diseño de cubierta y libro: Claudio Romo y HARI Rodríguez.
Alexis Figueroa: guiones y textos.
Claudio Romo: curatoría ilustraciones.
Ibi Díaz: dibujo del capítulo “Memoria”.
Elisa Echeverría: dibujo del capítulo “Astronomía”.
Vicente Plaza: dibujo del capítulo “Viaje”.
Fabián Rivas: dibujo del capítulo “Marcha”.
Claudio Romo: dibujo del capítulo “Nadie”.
Francisco Muñoz: dibujo del capítulo “Lota 2018”
Las tipografías utilizadas son Lynotype Typo American, y Brandon Printed.

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